False.

 Que humano es echarle la culpa a los demás. Qué bueno es mirarse el ombligo, sin importar lo que por ti hicieron. Soy una más, que traicionan, que hacen llorar, y rompen una gran parte de su corazón, el que nunca estuvo completo. También soy aquella a la que nadie hundió por mucho más que lo intentaron. Los amigos se cuentan con los dedos de la mano y más de una vez, te los cortan.